La experiencia de tu vida
Quien ha observado a una ballena, puede constatar lo maravilloso que es mirar los movimientos de las ballenas y admirar toda la magnificencia que inspira desde su voluminoso cuerpo. La observación de ballenas es una actividad que poco a poco ha cobrado numerosos adeptos debido a su carácter recreativo pero también científico.
Consiste en mirar a los cetáceos en su hábitat natural desde una distancia prudente para no afectar sus actividades. Debido a que se realiza en un área natural, los cetáceos observados suelen ser aquellos que se desplazan en aguas específicas para continuar con su ciclo de vida. Por ejemplo, la ballena jorobada (Megaptera novaeanglie), llegado el invierno, migra hacia aguas mexicanas para reproducirse, así que algunas áreas de las costas este del Pacífico son perfectas para mirar a esta ballena, que dicho sea de paso, es un rorcual.
Hoy, múltiples acuarios y zonas naturales ofrecen a los turistas esta actividad, que se ha convertido en una opción muy redituable dado el éxito que ha tenido. De acuerdo con datos del IFAW (International Fund for Animal Welfare), sólo en el año 2008, 13 millones de personas de todo el mundo acudieron a mirar ballenas. Año con año, la actividad genera cerca de 2.1 billones de dólares.
Si tú deseas acudir a una zona determinada para tener la oportunidad de mirar uno o varios cetáceos, debes saber que implica recorridos por tierra, por aire o por mar, dependiendo del acceso al hábitat de los animales. En algunos lugares las ballenas permanecen relativamente cerca de las costas, por lo que no es necesario trasladarse en alguna embarcación.
La observación de ballenas tiene dos variantes. En una, la persona acude específicamente para mirar a los cetáceos y es la principal motivación para realizar el viaje. En otra, la observación está incluida en otra serie de actividades o la intención principal no es visitar sus hábitats ni mirarlas, sin embargo, es una atracción importante.
Sitios ideales para la observación de ballenas
-Point Reyes National Seashore. Este sitio se encuentra en la costa oeste de Estados Unidos. Abril y mayo son los meses en los cuales se pueden ver ballenas grises (Eschrichtius robustus) con sus crías desde este punto, que se acercan hacia las costas.
-Stellwagen Bank Nacional Marine Sanctuary. Se trata de un santuario para animales marinos, ubicado en Massachusetts, Estados Unidos. Ballenas jorobadas (Balaenoptera physalus), rorcuales aliblancos (Balaenoptera acutorostrata), rorcuales australes (Balaenoptera bonaerensis) y rorcuales comunes (Balaenoptera physalus) son posibles de avistar desde el santuario.
-Cabrillo National Monument. Es un parque nacional situado en San Diego, Estados Unidos. Fue pionero en ofrecer la actividad de observación de ballenas en 1950 y desde entonces se convirtió en un lugar perfecto para mirar a las ballenas grises que pasan por ahí desde diciembre hasta marzo.
-Bahía de Banderas. Ofrece también la visión de las ballenas grises desde mediados de diciembre y hasta finales de marzo. Se encuentra en el estado de Nayarit, México.
-Península de Valdés. Localizada en la parte más austral de Argentina, la Península de Valdés ofrece la visión de ballenas francas australes (Eubalaena australis) desde junio hasta diciembre.
-Uramba Bahía Málaga National Natural Park. Es un parque nacional de Colombia asentado en la bahía de Málaga. Es un popular sitio de observación de ballenas jorobadas, que acuden a reproducirse entre junio y octubre.
¿Observarás ballenas? ¡Espera!
Toma en cuenta que el lugar en el que observarás a los cetáceos sea un sitio amigable con el medio ambiente y que no interfiera con su vida. El incremento de turistas en las zonas de visita de las ballenas constituye una de las amenazas que tienen que enfrentar, debido a que la actividad puede perturbarlas.
Si vas a admirar ballenas, ya sabes, hazlo con prudencia para que la experiencia resulte benéfica y enriquecedora.